Juegos Panamericanos: propiedad intelectual en movimiento

Los Juegos Panamericanos son el evento deportivo más célebre en el continente americano, en que miles de deportistas de 41 naciones compiten en diversas disciplinas. No se trata únicamente de una celebración del deporte, sino también de una manifestación de la cultura, la identidad y la creatividad de los países anfitriones y participantes.

Gonzalo Sánchez Serrano

La protección de los derechos de propiedad intelectual en los Juegos Panamericanos se constituye en una valiosa oportunidad para fomentar conciencia sobre la importancia de proteger la PI en eventos de esta magnitud. Esta organización ciertamente se toma el tema en serio y se puede decir, con certeza, que existe una acendrada cultura de protección de sus derechos.

Lo anterior no podría ser de otra manera, desde el momento en que se comprende que la propiedad intelectual de los Juegos Panamericanos tiene un valor económico, social y cultural y su protección implica reconocer el esfuerzo y el talento de los creadores e innovadores que contribuyen al éxito del evento y se estimula el desarrollo de las industrias creativas.

En esta versión XIX la organización ha desplegado una robusta estrategia de protección de propiedad intelectual. En este tipo de eventos se suele proteger, desde los símbolos oficiales, las marcas, la mascota, el himno, hasta las obras artísticas, musicales y audiovisuales creadas para las ceremonias de apertura y clausura, así como los diseños de medallas, trofeos y productos promocionales.

Concretamente, las gestiones de propiedad intelectual en este evento se han traducido en la protección de más de 130 marcas comerciales ante INAPI y diversos contenidos que fueron debidamente depositados en el Departamento de Derechos intelectuales.

A propósito de la protección marcaria, se propuso incorporar dentro del portafolio de la organización un nuevo tipo de marca que figura recientemente en la ley de propiedad industrial y que se denomina “marca en movimiento” constituyéndose en la primera marca no tradicional de este tipo que se solicita en Chile para eventos deportivos.

Esta marca en movimiento consiste en la mascota oficial de los Juegos que consiste en un pájaro de siete colores que representa la diversidad de los seres humanos y los deportistas de América. El nombre de la mascota es FIU y fue elegido por 45.000 votantes on line. La marca, cuya protección se solicitó ante INAPI, consiste en una secuencia donde la mascota aparece en primer plano y posteriormente hace un guiño.

Por otro lado, la protección de la identidad comercial también se extendió al ámbito de las redes, protegiéndose variados nombres de dominio. Con estas medidas se evita la aparición de actos de piratería, falsificación o uso indebido que puedan afectar la imagen y la reputación del evento, así como los derechos e intereses de los propietarios intelectuales.

La filosofía de esta organización de hacerse cargo de su propiedad intelectual finalmente es un homenaje a los valores olímpicos como el juego honesto, la solidaridad y el respeto tanto entre los participantes como entre el público.

Gonzalo Sánchez Serrano es socio en Santa Cruz IP, abogado de la Universidad de Chile y cuenta con un postítulo en comunicación estratégica en la Universidad Católica de Chile.

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