Los gerentes legales ganan relevancia en China

China se ha convertido en unos los principales socios económicos de Chile y del mundo: en 2019 se transformó en uno de los mayores receptores de los productos y servicios de ese país, con una participación en las exportaciones de un 31,1%.

La relevancia comercial de China actualmente tiene a «este país» como el segundo país con mayor volumen de importaciones, que representan el 14,48% de su PIB, es decir, la suma de € 1.855.379 millones.

Y así como transar con este país se ha vuelto un desafío para muchas empresas, también lo es para las firmas legales vinculadas a estos procesos económicos, que tienen implicancias tanto al interior de China como en sus inversiones a nivel global. Por lo tanto, entender su cultura y forma de negociar se han vuelto temas de interés para inversionistas y estudios jurídicos.

En este contexto, para el abogado y subdirector del programa Derecho, Ciencia y Tecnología de la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Matías Aránguiz, el rol de las gerencias legales ha ido creciendo dentro de la cultura empresarial china. Hace una década, el sistema jurídico chino no les entregaba mayor relevancia hasta el auge económico de la primera década del 2000.

“Con el crecimiento de la normativa y de los marcos regulatorios también han crecido las gerencias legales, aunque no tienen la fuerza en otro países, pero cada vez van tomando más fuerza, hay un avance”, sostiene el abogado.

Legislación madura e inversión internacional

Matías Aránguiz vivió más de 6 años en China, donde estudió un magister en finanzas y un doctorado en inteligencia artificial en mercados financieros, trabajando posteriormente en inversiones y como asesor legal.

Matías Aranguiz

De acuerdo a su experiencia, él plantea que el crecimiento de las gerencias legales se ha dado por dos razones. La primera tiene que ver con que la legislación en ese país se ha generado de forma rápida y con altos niveles de “maduración e inteligencia”, por lo que han crecido en regulaciones de buena calidad que hay que tomar en consideración. De lo contrario puede ser un elemento que puede generar un alto nivel de conflicto.

Aránguiz comenta que ya no es tan necesario, como solía serlo, tener contactos con el gobierno chino, sino que «efectivamente hay que entender la normativa”.

Y lo segundo es que tras la «crisis asiática» de la década de los noventa, en la que se hicieron fuertes inversiones en el extranjero, la cultura empresarial china se habría dado cuenta de que “deben adecuarse a regulaciones externas» y, por tanto, «las gerencias legales han tomado más fuerza y se incrementará su rol en el futuro”.

El Estado como “compañero”

Desde occidente existe una serie de ideas preconcebidas acerca del tipo de vinculación que tienen las empresas privadas con el Estado chino, las que rara vez sabemos si son acertadas. Este académico explica que en ese país las compañías nunca son “completamente privadas”, es decir, no hay una ninguna que sea 100% independiente del gobierno: “Allá, a diferencia de nosotros, para cualquier área productiva se debe tener licencias y permisos especiales”.

No obstante, el Estado, más que una contraparte, sería un “partner», una especie de “amigo”. «Uno tiene que estar siempre en buenas relaciones con el gobierno, lo que no significa corrupción, sino que tiene que ver con alinearse a ciertos principios o valores, lo que te hace la vida bastante más fácil dentro de tu empresa”.

El rol de las firmas locales y extranjeras

Las firmas jurídicas locales son las que tienen mayor trascendencia en el mercado local, dentro de un concierto internacional globalizado que ha permitido que diversas oficinas internacionales se instalen en China por medio de asociaciones.

Es así como en materia de abogadas y abogados, dentro de las transacciones internas lo más probable es que se acuda a oficinas chinas. Las firmas internacionales siempre trabajarían con ellos, porque el permiso o licencia para ejercer como abogado sólo se les otorga a los nacionales: «Las oficinas locales tienen una influencia bastante relevante”, dice Matías Aránguiz.

En este contexto, se agrega otro dato: la regulación china permite que las empresas de abogados extranjeras “sólo puedan asesorar y siempre y cuando lo estén haciendo respecto a derecho extranjero”. Sin embargo, si quieren hacer negocios fuera de su país, contratan una firma del lugar en que invertirán: «Sí o sí; es un hecho”.

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