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jueves, 25 de abril de 2024

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Los costos de la independencia: horarios irregulares amenazan la salud mental de los abogados freelance

Muchos renunciaron a sus trabajos en grandes firmas y armaron sus despachos en las casas. Un sueño que, para muchos, se podría convertir en una pesadilla. Un informe sobre tendencias legales para oficinas jurídicas individuales concluyó, tras encuestar a más de mil profesionales en Estados Unidos, que la excesiva flexibilización de las jornadas y la gestión administrativa individual serían factores preponderantes a la hora de hablar de agotamiento laboral.

- 26 abril, 2023

La mayoría de los abogados independientes desean tener flexibilidad para establecer sus horarios, pero trabajar jornadas irregulares y prolongadas podría estar afectando su salud mental. Y aunque alrededor del 20% de estos profesionales dejó su trabajo como parte de la llamada “gran renuncia” con el objetivo de alcanzar un mayor salario y lograr un mejor equilibrio entre el trabajo y la vida personal, no todo ha sido números azules para la experiencia.

Esta es una de las principales conclusiones del informe sobre tendencias legales para despachos jurídicos de profesionales individuales realizado por la empresa de tecnología legal Clio. El estudio se basó en un nuevo análisis de lo ya monitoreado en 2022 en el mercado jurídico de Estados Unidos por la misma compañía.

¿Qué otros datos arrojó el análisis? El 31% de quienes abandonaron sus puestos en despachos jurídicos establecieron sus propios estudios en solitario y el 62% de estos abogados independientes indicaron que prefieren trabajar desde casa. Además, el 50% señaló que les es más cómodo reunirse con sus clientes de manera virtual y el 89% aseguró que desea trabajar fuera del horario laboral típico.

Pese a estos avances en poder manejar sus propios ritmos laborales, el informe sugiere que los horarios irregulares están afectando la salud mental de estos profesionales: mientras un 81% informó tener un “bienestar mental y emocional positivo” cuando optaron por jornadas laborales clásicas, casi la mitad de aquellos que lo hicieron de otra forma “no pudieron decir lo mismo”.

“Al adoptar ciclos de trabajo más flexibles, los abogados freelance a menudo lo hacen a expensas de la gestión del tiempo, los ingresos para sus despachos y, lo que es más preocupante, su salud mental”, concluyó el estudio, basado en una encuesta realizada a 1.134 profesionales legales, 458 profesionales no legales y 1.168 consumidores dentro del país.

Grandes despachos jurídicos y abogados freelance

Joshua Lenon

Joshua Lenon, abogado “en residencia” y oficial de protección de datos de Clio, explicó que hay una “gran disparidad” entre los profesionales legales freelance que trabajan en horarios regulares y aquellos que lo hacen fuera del régimen laboral tradicional, según consignó el portal Aba Journal.

El especialista dice que las necesidades administrativas de dirigir un despacho individual y los roles adicionales que asumen para desarrollar y comercializar sus negocios también agregan “factores estresantes únicos”.

“Cuando juntas todas estas tareas te das cuenta de que muchos abogados están abarcando demasiado trabajo a la vez”, plantea.

Este nuevo análisis sugiere que tanto los profesionales freelance como los abogados de firmas legales trabajan más de 40 horas a la semana. Además, un 54% lo hace los días sábado y un 40% se dedica a su despacho incluso el domingo.

“Aunque la libertad de elegir sus propias horas es probablemente una ventaja importante, muchos también quieren vivir y disfrutar de sus vidas fuera del trabajo. A pesar de estas preferencias, los abogados independientes son mucho más propensos que los profesionales que trabajan en despachos jurídicos a trabajar más allá de las 6 de la tarde”, reveló el informe.

Herramientas digitales

Lenon plantea que la tecnología, incluyendo los software de gestión administrativa, tiene un papel importante que cumplir en ayudar a la salud mental y el bienestar de los profesionales freelance del área legal abrumados con la programación de reuniones, la comunicación con sus clientes, la gestión de documentos y una serie de otras tareas que devienen del trabajo en solitario.

“Simplemente reducen un poco la carga administrativa que los abogados independientes asumen”, dice. “Cuando limitamos esa carga, podemos tener algunos bordes que reducen el estrés mental y emocional”.

Sin embargo, el informe sugiere que en lo que respecta a la adopción de tecnologías, los independientes han utilizado más de estas herramienta que quienes trabajan en despachos jurídicos: un 85% de los abogados freelance utilizan softwares de gestión de prácticas legales basado en la nube para su trabajo, en comparación con un 55% que las usa en sus tareas dentro de grandes estudios jurídicos.

También se identificó que desde 2019 los abogados de grandes firmas han cobrado 20% más por hora que los independientes, pese a que estos últimos tienen costos generales más bajos. Aquello puede darles una ventaja competitiva a la hora de establecer aranceles más económicos para sus representados.

El estudio además determinó que aunque las tarifas por hora están aumentando para los freelance, “no han seguido el ritmo de la inflación” y advierte: para que los independientes y las firmas grandes se mantengan al día, tendrían que aumentar sus tarifas en US $12 por hora.

 

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