Perú a la moda

Equipo Idealis
 
Dentro de las nuevas áreas en las que ejercer la profesión, han surgido el arte, el deporte y la moda. En esta última hay un interesante artículo de “Conexión Esan”, en que explican cómo surgió el Fashion Law en Perú, en la década de los 90, con la aparición de los diseñadores de moda, y más tarde se consolidó con los centros comerciales.
 
“La proliferación de malls a nivel nacional permitió a su vez que una gran cantidad de marcas internacionales como Zara, Forever 21 y H&M se animaran a entrar al país”, se lee en la publicación.
 
El derecho de la moda se preocupa de asesorar en la revisión de contratos típicamente relacionados con la industria de la moda y retail: contratación de promotores, distribuidores, fotógrafos, modelos, estilistas, productores de desfiles o agencias de publicidad son algunos de los temas. También recomiendan cuáles son la particularidades de contratación de su personal o de las modelos que lucen sus productos. Pero también se incluye a distribuidores, proveedores, personal shoppers, institutos educativos de modas, agencias de modelos y publicidad, titulares de marcas, centros comerciales, empresas mayoristas y minoristas.
 
Además, puede intervenir en la asesoría en las formas de financiamiento para atraer a nuevos inversionistas a este sector o en el planeamiento tributario de su negocio, indicándoles cuál es la forma más segura de franquiciar o licenciar su marca; incluso en el registro de su diseño protegiendo su autoría; o en la construcción de un centro comercial y su organización interna o en la ocupación del mismo como arrendatario, entre otros.
 
En este contexto —bastante amplio— el asesoramiento legal se puede presentar en todas las fases o etapas de la cadena de producción: importación, producción, fabricación, distribución, comercialización y promoción del producto.
 
No hablamos sólo de ropa y zapatos, sino que también de joyas, productos cosméticos, perfumes y accesorios en general tales como lentes, carteras, correas y sombreros.