Remotamente cerca: abogados desde casa

Garnham Abogados

Sofía Martin / Samuel Osorio

Justo hace una semana, el lunes 16 de marzo, Garnham Abogados, firma chilena, amaneció trabajando desde casa. Al finalizar la jornada enviaron un mailing a sus contactos, en el cual aparece un collage con selfies de cada abogado (ver imagen), anunciando y mostrando que estarían atendiendo a sus clientes con normalidad.

Otro abogado, profesor universitario y socio de una boutique de litigios y arbitraje, relata que a medida que pasaban los días, eran los profesionales jóvenes los más alterados con la posibilidad de contagio, pues usaban el metro. Optaron por cerrar la oficina y trabajar todos desde casa, con 2 reuniones diarias, para verificar avances.

En su sitio web aparece un pop up explicando, en castellano y en inglés, que todos los abogados se encuentran operativos, previa adopción de las medidas técnicas necesarias.

Una conexión wifi no basta

“Lo que queríamos era ‘que no se note la diferencia’”, dice Simón Zañartu, socio de Garnham: tener la misma rapidez de respuesta, la misma calidad, que la extensión de contenidos sea exactamente igual, añade.

Ramón Gálvez

Sin saberlo, se habían preparado tomando medidas hace 2 años: “La tecnología que usa la oficina es propia, con un desarrollo de software a la medida y tenemos nuestros servidores en Estados Unidos”, cuenta.

¿Fue complejo? Zañartu asegura que todo lo contrario: “Para implementar home office, lo único que hicimos fue agarrar nuestros notebooks y partir. Todos tenemos instalados los sistemas de protección de datos, de administración interna y de digitalización de documentos”. Hace ya tiempo han ido disminuyendo el uso de papel y su uso de carpetas es reducido, afirma.

Dado el escenario internacional, desde la firma Gálvez Risso Zegarra (Lima, Perú) se habían planteado, días antes del decreto de confinamiento, que todos sus colaboradores realizaran teletrabajo, dicen. Ramón Gálvez, socio del despacho, lo resume así: “En lo relativo a la epidemia, teníamos que enfocarnos en 3 puntos de vista. Lo primero era cuidar la salud del personal; desde ahí teníamos que pasar a ver cómo seguir con la dinámica de trabajo de la oficina y el tercer tema era cómo afrontar la situación respecto del cliente”.

Josefina Avetikian, de Chirgwin

Por su parte, en el estudio Chirgwin Peñafiel (Santiago de Chile) comentan que desde 2018 hicieron “múltiples reuniones, revisiones y pruebas de distintas herramientas”, para finalmente optar por el conocido Office 365 y sus complementos. En la decisión influyeron 3 puntos clave: confiaron en que les proveía seguridad y confidencialidad de la información; tenían accesibilidad en la oficina y de manera remota; y se integraba bien con otros sistemas.

En esta familia tecnológica, la nube es OneDrive: “Nos permite tener acceso seguro a todos los documentos, que pueden ser trabajados de forma remota desde cualquier lugar, ofreciéndonos la seguridad que nos puede entregar un proveedor grande como Microsoft”, dice Andrés Chirgwin, socio de la firma.

Microsoft Teams, en tanto, es la herramienta para trabajar y revisar en línea documentos, así como para llevar a cabo reuniones de trabajo con los clientes e internas, mediante videollamadas. “Y Planner es la que nos permite organizar y seguir en línea nuestros proyectos y tareas”, añade.

Protocolos y cambio

Fernando Rodríguez

En el estudio peruano Rodríguez Angobaldo, ante la amenaza del Covid-19, se priorizó la protección de su staff. Fernando Rodríguez, uno de los fundadores de la firma, cuenta que el domingo 15 de marzo los socios y el gerente general evaluaron los posibles escenarios que se iban a enfrentar y planificaron las medidas que adoptarían para asegurar la continuidad de los servicios.

El objetivo inicial fue mantenerse a no menos de un 80% de capacidad y para ello crearon un protocolo y equipos especiales de teletrabajo, que son “liderados por dos socios por equipo, ligeramente distintos a la organización normal de trabajo de la firma”.

“Para poder brindar el mismo servicio, además de la coordinación interna, venimos haciendo uso de herramientas tecnológicas, como Blujeans para mantener una comunicación continua con nuestros miembros por medio de videoconferencias, TimebillingX para el registro de horas de trabajo, WhatsApp para grupos de chats, y otros programas que nos permiten conectarnos con nuestro servidor para acceder remotamente a nuestros archivos digitales”, afirma Rodríguez.

Desde la otra vereda

¿Cómo han tomado los clientes el teletrabajo? Simón Zañartu, socio de Garnham Abogados, dice que recién el día jueves comenzaron a notar cierto grado de normalidad: “El lunes ya estábamos operativos, pero algunos de nuestros clientes seguían en sus oficinas martes y miércoles. Se percibía que estaban un poco abrumados”.

En Perú, Fernando Rodríguez, de Rodríguez Angobaldo, relata que informaron a sus clientes apenas implementaron la medida: “La receptividad ha sido excelente y con empatía. Al estar todos afrontando la misma situación, la interacción viene funcionando de la mejor forma”, sostiene.

Andrés Chirgwin, desde Chile, califica la reacción de los clientes como “muy variada”. En general, el seguimiento de los clientes a los proyectos en curso ha bajado, ya que la semana anterior tuvieron que enfocarse en solucionar sus problemas domésticos.

Los temas corporativos y proyectos nuevos han disminuido a cero, e incluso han existido algunos casos en que derechamente se han suspendido proyectos en curso.

Sin embargo —prosigue Chirgwin—, han recibido múltiples preguntas respecto de los efectos de la crisis en los contratos que ya se están ejecutando, así como también «numerosas consultas sobre materias laborales, enfocadas principalmente en desvinculaciones».

Otros de los abogados entrevistados para esta nota coinciden en el diagnóstico de la situación actual: cero o muy poco seguimiento de las solicitudes vigentes, cero o ínfimos requerimientos nuevos, y un alza en las consultas de tipo laboral, aunque no sean la especialidad del profesional en cuestión.

Webinars: la tendencia que no acaba

Estudio Muñiz

Además del teléfono, los correos y las plataformas colaborativas, los estudios han hecho esfuerzos por mostrar a sus pares y a los clientes que están activos y que pueden responder virtualmente con prontitud.

En LinkedIn —la red por excelencia de los abogados— circula profusamente este tipo de información, pero más allá de los anuncios, ya existen programadas clases y seminarios online.

El jueves pasado, a las 16.00 horas de Perú, el estudio Muñiz organizó un webinar abierto, en el que 10 abogados de diversas especialidades abordaron distintas materias que podrían afectar legalmente a las empresas, debido al estado de emergencia provocado por el Covid-19.

Mauricio Olaya, socio principal de Muñiz, fue el encargado de abrir y moderar la videoconferencia, que se enfocó en respuestas y casos prácticos que están enfrentando las empresas por el estado de emergencia. Así, algunos de los temas tratados en un extenso streaming fueron derecho administrativo; ingreso al país y circulación de bienes y personas; contratos y cumplimiento de obligaciones en un contexto de fuerza mayor; cumplimiento de obligaciones tributarias; derechos de los deudores financieros; qué actividades económicas están permitidas y cómo manejar las zonas grises de las actividades complementarias a aquellas.

Una edición del webinar ya está en Youtube. Hoy lunes 23, a media tarde, se hizo una segunda transmisión y dejaron programada una tercera para este miércoles 25, nuevamente a las 16.00 horas de Perú, sobre plazos y obligaciones ante la administración pública durante el período de emergencia.

ObradorDigital.

Como uno de los temas que preocupa a toda la sociedad, en todos los países, ha sido el laboral, el primero en exponer fue Ricardo Herrera, director de ese área en Muñiz, quien destacó que las operaciones presenciales sólo son justificables en los servicios esenciales y de seguridad del país, así como la necesidad de promover el teletrabajo para solventar la falta de posibilidad de traslado de los trabajadores, en la medida de lo posible.

Ahora bien, Muñiz es una firma de gran tamaño ¿qué posibilidad de conectarse con los clientes tienen otros abogados, como los que trabajan en forma independiente o en un estudio pequeño? María José Arancibia es un ejemplo de la proactividad de los abogados desde casa: ObradorDigital es el nombre de su despacho, que abrió hace algunos meses. Aclara que aunque su sitio web está en período de correcciones y hubiera preferido tomar acciones comunicacionales con él terminado, éste es un momento para tomar decisiones: este martes, a las 16.00 hrs. de Chile, transmitirá vía Facebook Live una charla sobre propiedad intelectual y emprendedores “en tiempos complejos”.

Con esta charla, Arancibia Obrador dará inicio a una serie de programas en dicha plataforma ¿Por qué eligió esta manera? “Decidí hacer los FB live porque doy clases hace años y siento que puedo orientar en algunos temas legales a los eligieron emprender y se toparon con este escenario. Es un momento complejo y quisiera aportar en algo”, responde.

Luis Patricio Ríos

Aquí te dejamos el link.

Otro ejemplo lo ha dado Luis Patricio Ríos, quien en LinkedIn posteó: “Ya que nos quedamos en casa para que pase la pandemia, quiero contribuir con un granito de arena y poner a disposición de mis colegas y todo el que se interese en el tema, mi libro de 2017 sobre la Inembargabilidad. Adjunto el link en donde puede ser descargado gratuitamente”.

Sobre fuerza mayor y fijación de precios

Continuando con las dudas de la ciudadanía, otro de los temas que mayor temor causa en los clientes y que se abordó en el webinar de Muñiz, fue el incumplimiento contractual. Pierino Stucchi, decano de la Facultad de Derecho y Ciencia Política de la Universidad Norbert Wiener y director de las áreas de libre competencia, consumo y protección de datos de la firma, se refirió a la aplicación de la fuerza mayor como factor determinante en la responsabilidad civil.

Por otro lado y ante las dudas de una posible fijación de precios, Stucchi aseguró que el Indecopi no puede controlar los valores de las mercancías y que esa medida solo puede ser promulgada desde el Ejecutivo mediante un decreto de emergencia. Su opinión también fue expuesta en el artículo “Coronavirus: ¿Cómo blindar a los consumidores frente al encarecimiento y especulación de precios?”, publicado el domingo en el diario El Comercio, y tuvo como contraparte a Carlos Zúñiga, presidente de Elegir Perú, quien estaba a favor de la fijación del precio de determinados bienes.