Jóvenes abogados quieren más descanso y menos jerarquía

 
Los abogados del mañana no tendrían entre sus prioridades laborales las aspiraciones económicas o las perspectivas de carrera. Los estudiantes de Derecho piden a los estudios de abogados una revolución con cambios que los beneficien personalmente: fomentar la vida familiar, lograr un buen descanso, ser más eficientes para reducir las horas laborales, trabajar en un ambiente con menos jerarquía.
 
Estas propuestas las recogió el diario económico español Expansión, entre 10 estudiantes de Derecho de centros universitarios de todo el mundo, reunidos bajo el programa Law Without Walls, organizado por la Universidad de Miami.
 

Menos verticalidad, menos jerarquía

Algunas de las ideas más llamativas fueron disponer de zonas de descanso dentro de los estudios para practicar yoga o contratar a abogados capaces de idear una aplicación capaz de resolver problemas legales. Otra de las conclusiones es la importancia de cambiar la estructura de los estudios, en el sentido de que es esencial eliminar el sistema vertical reinante en los estudios y trabajar de forma horizontal, sin tanta jerarquía, en que todos los abogados tengan la opción de opinar sobre los asuntos y aportar ideas para soluciones. O sea, que los senior confíen en los conocimientos de sus jóvenes incorporaciones.
 
Las preguntas que respondieron los estudiantes para llegar a estas conclusiones fueron dos: la primera, ¿qué cambio sustancial introduciría en un despacho para adaptarlo a las necesidades del siglo XXI? Y la segunda, en caso de tener que escoger entre varios estudios, ¿qué aspecto le impulsaría a decantarse por uno u otro?
 
Algunas de las respuestas fueron:

Ben Ramsdale
University College of London

1. “El estrés es habitual en sectores competitivos como el de la abogacía y una mente saturada no es productiva. Invertir un poco de tiempo para aliviar este problema generaría trabajadores más felices, eficaces y que obtienen mejores resultados. Por eso, me gustaría que los bufetes pensaran en adoptar medidas para reducir este estrés, creando zonas de descanso en la oficina para poder practicar meditación o yoga, por ejemplo”.
 
2. “Creo en la felicidad de los trabajadores. Un empleado contento es un buen empleado. Por eso, y a pesar de que siempre sería importante optar por un buen estudio, que cuente con una buena reputación en el sector y que tenga una visión innovadora frente a los nuevos retos, elegiría siempre por el que fomente el mejor ambiente laboral”.

Zoe Friedland
Stanford Law School

1. “El paso más importante que deberían dar los despachos de abogados es apostar definitivamente por la conciliar el trabajo con la vida familiar; asegurar un plan de carrera sostenible para todos los que quieren fundar una familia y estar disponible para ella, sin que esto afecte la labor que realizan en la oficina. El que una mujer se sienta obligada a abandonar su profesión por querer ser madre debe ser erradicado. De hecho, las propias compañías deberían fomentar entre sus trabajadores -mujeres y hombres- que tengan familia, sin que esto implique sacrificar sus perspectivas de carrera”.

2. “Si tuviera que optar entre dos despachos semejantes, siempre me decidiría por aquel que contara con una fuerte práctica pro bono. Creo que todas las empresas deben aportar y ayudar a los ciudadanos que forman parte de su comunidad. Este tipo de compromiso hacia los más necesitados y su representación legal sería esencial para mí”.

Gustavo Sanseverino
Universidad de Sao Paulo

1. “Una empresa debe ser capaz de establecer una cultura de diálogo entre sus diferentes áreas de práctica. En ese sentido, apostaría por implementar una estructura en la que se invitase a todos los abogados a participar, una vez por semana, en un proyecto llevado a cabo por otro departamento. Esto forjaría un enfoque de colaboración y serviría para plasmar los métodos de resolución de problemas que puedan aparecer en la firma. Esta estructura de diálogo se convertiría en un importante mecanismo para incentivar tanto la cohesión y la eficiencia como la creatividad en la oficina”.
 
2. “Me gustaría dar prioridad al estudio orientado al mundo de los negocios, que crea en la tecnología y abarque los problemas con soluciones innovadoras, manteniendo así a sus abogados motivados y preparados para cualquier situación. Esta firma debería también tener la capacidad de comprender en su totalidad las necesidades de sus clientes, combinando conocimientos jurídicos con una mentalidad empresarial. Por último, no habría que olvidar que el bufete debería hacer un esfuerzo en identificar los puntos fuertes y ambiciones de sus abogados, de tal manera que le puedan guiar y posicionar en el mejor puesto”.
 
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