La semana en que la Corte Suprema chilena perdió su vocería

Originalmente, la vocería de la Corte Suprema de Chile —establecida formalmente en mayo de 2016— es un canal creado para uniformar y dar a conocer la opinión de su Pleno o salas, en el marco de sus atribuciones, frente a los medios de comunicación. En términos muy simples, es la voz de este Poder del Estado frente a la opinión pública, reconociéndose como una figura de alta relevancia y exposición, solo detrás de quien ostenta el cargo de Presidente de la institución.

Esta semana, esa figura se perdió, luego que la ministra de la Tercera Sala Constitucional del máximo tribunal, Ángela Vivanco Martínez presentara su renuncia voluntaria a ese rol, tras brindar una extensa entrevista que generó una controversia política y jurídica de magnitud en el país, sobre un fallo que obligaba a las ISAPRES a restituir los cobros en exceso a sus cotizantes por la aplicación de una tabla de factores, emitido en noviembre de 2022, en plena discusión sobre la contribución de esta institucionalidad a las políticas de salud pública y privada de la población.

Ministra Angela Vivanco

En esa entrevista —dada a diario La Tercera el domingo pasado— la ministra aseguró que esa restitución de fondos debía realizarse solo a quienes realizaron presentaciones ante la justicia, eliminando la idea general de que esa devolución debía extenderse a toda la cartera de cotizantes, lo que podría incluso repercutir en una posible desaparición del sistema de salud privada.

Su opinión —la que aclaró más tarde que fue realizada a título personal— no dejó indiferente a nadie. Ni a los propios ministros de la Tercera Sala Constitucional, considerada una de las más influyentes del máximo tribunal, ni a las propias ISAPRES, ni al Gobierno que rápidamente anunció la solicitud de un Recurso de Aclaración, para justamente conocer los verdaderos alcances del fallo y de cómo este se superponía a las opiniones de la ministra portavoz.

Primero, fue la ministra de Salud, Ximena Aguilera, quien adelantó en el Congreso Nacional, los detalles del recurso, para luego ser confirmado por la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo. La petición, finalmente fue ingresada por las autoridades de la Superintendencia de Salud. Con el documento, comenzaba el camino para que la Suprema perdiera su vocera.

Renuncia

Juan Eduardo Fuentes Belmar

Con los hechos desbocados y una serie de interrogantes abiertas, fue el miércoles que la ministra presentó su renuncia oficialmente. Fue un Pleno extraordinario del tribunal el que acabó aceptando la decisión, lo que a su vez fue comunicado por el presidente, Juan Eduardo Fuentes Belmar.

“Se reunió el Tribunal Pleno para tomar conocimiento de la renuncia voluntaria que presentó la ministra señora Ángela Vivanco Martínez al cargo vocera titular de la Corte Suprema, función que fue designada por Acta N° 67-2022, de 21 de marzo de 2022. Se acordó aceptar la renuncia voluntaria presentada por la ministra y también agradecerle especialmente su destacado desempeño, compromiso y dedicación durante el periodo en que se ejerció dicha labor”, señaló el presidente.

En tanto, en la carta de renuncia que hizo entrega al presidente de la Corte Suprema, la ministra Vivanco consignó que “agradezco a usted la oportunidad brindada y la confianza depositada en mí durante el ejercicio de esta vocería, como asimismo a aquellos ministros que, con lealtad y aprecio, me apoyaron en mi desempeño, particularmente a los miembros de la Tercera Sala, a la cual con mucho orgullo pertenezco”.

El impacto del fallo

Cabe recordar que el fallo de 2022 de la Suprema obligó a las Isapres a aplicar de forma retroactiva los cobros en exceso y usar una nueva tabla de factores para todos sus cotizantes, independiente de la época en que hayan entrado al sistema. La interpretación que todo hizo el mundo —incluido el político y los especialistas en la materia en ese entonces— era que la sentencia tenía efectos generales. Es decir, que favorecía a unos 3 millones de cotizantes, dejando en una posición compleja a las aseguradoras, puesto que significaba a priori la restitución de unos 1.400 millones de dólares.

Fue tal el nivel del impacto del fallo, que las posteriores declaraciones de la ministra vocera resonaron en el gobierno. Ante la nueva realidad generada por la entrevista, varios ministros e incluso el Presidente del Gobierno, Gabriel Boric, solicitaron públicamente una aclaración, ya que de seguir el nuevo criterio, la sentencia tendría un alcance acotado.

“En esto sería relativamente cauteloso. Aquí lo que importa es lo que dice una sentencia judicial. Hoy existe un nuevo criterio que nace a partir de la entrevista de la ministra Vivanco y, por lo tanto, lo responsable y razonable es solicitar esa aclaración en base a esta nueva declaración. De modo que sea una resolución judicial y no una simple declaración de prensa la que defina los contornos de las obligaciones que están asociadas”, señaló el Ministro de Justicia, Luis Cordero.

Con la renuncia de Vivanco, la Suprema pretende dejar atrás los cuestionamientos, pero resuenan los ecos de una acusación constitucional. Para algunos es un camino jurídicamente fundamentado; para otros, un despropósito.

 
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