Santiago Portaluppi Fernández es miembro activo de la Asociación de Derecho Administrativo de Chile (ADAD)....
La carga de trabajar con personas con problemas llevaría a los abogados a ser más propensos al abuso de alcohol
Según un estudio realizado en Estados Unidos, el 21% de los abogados en ejercicio experimentan algún problema con la bebida. En Chile no hay cifras, pero es una carrera en la que el problema está latente. Las alta exigencias, horarios extensos y la exposición frente a otros también incidirían en el desgaste.
3 marzo, 2016
-Pierina Cavalli
Niveles de estrés y ansiedad son comunes -sobre todo ahora que marzo se nos vino encima-, pero en el mundo de los abogados, es un estado recurrente. Y si estos niveles aumentan, ya sea por un incremento de la carga laboral o agentes de la vida privada, es más probable en estos profesionales que el consumo de alcohol también aumente.
Un estudio realizado de forma colaborativa por la Hazelden Betty Ford Foundation y la American Bar Association (ABA) hizo el primer intento sistemático de recabar cifras sobre el consumo de alcohol dentro de la profesión, en una investigación en que participaron más de 15 mil abogados de 19 estados.
Los resultados fueron que el 21% de los titulados en ejercicio tienen problemas de alcohol, el 28% sufre de algún grado de depresión y el 19% demuestra síntomas de ansiedad.
El estudio también descubrió que los abogados jóvenes, dentro de los primeros 10 años de experiencia, tienen una mayor incidencia en estas enfermedades. Y si sólo se toma en cuenta el volumen y frecuencia del alcohol consumido, 1 de cada tres abogados es un «bebedor problema», entendido como aquel que sufre efectos negativos en su vida como consecuencia del abuso de alcohol.
“Ser abogado no es solo un trabajo de 8 a 17 horas”, dice Kelly Olmstead, presidenta de Ramsey County Bar Association, al diario Star Tribune, haciendo eco de una noticia que fue publicada en múltiples medios tradicionales y especializados. “Tú te haces cargo de los problemas de la gente, sus miedos y preocupaciones, y viajan contigo en la noche cuando vuelves a casa. Y cuando ganas o pierdes un caso, tú sabes que esa es la vida de una persona”, dijo.
Abuso de alcohol en la realidad chilena
No hay ningún estudio que diga cuál es el porcentaje de personas, según su profesión, que tiene problemas de abuso de alcohol e Chile. “Solamente se sabe el nivel de estudios que tiene la persona”, dice la Dra. Marcela Babul, psiquiatra y directora de la Unidad de Adicciones de la Red de Salud UC CHRISTUS. Y agrega que la información que se puede extraer es según la experiencia clínica que se tenga con los pacientes.
Los abogados que han pasado por su consulta tienen una vida social intensa; horarios poco regulares: no tienen tiempo para comer sano ni para hacer actividades físicas; tienen reuniones con almuerzos y cenas incluidas.
Y comenta lo mismo que dice Kelly Olmstead sobre la pesada carga sicológica que implica: “Trabajar con clientes con problemas es muy exigente. Además de las obligaciones propias del trabajo de los abogados, que son leer, rendir, exponerse frente a otros, es un ambiente muy competitivo desde la universidad, desde memorizar grandes cantidades de temas hasta la oralidad”.
Cuando los trabajos presentan patrones como estar en contacto con personas en crisis, tener altas exigencias, horarios extensos, grandes responsabilidades, la ansiedad y los trastornos del ánimo aparecen. “Para sentirse mejor, profesionales como los abogados caen con mayor facilidad en la autoprescripción de benzodiacepinas, para compensar el insomnio y la ansiedad, o toman alcohol. Porque se ven tan superados que la ansiedad se transforma en un síndrome de burnout (o síndrome de desgaste profesional)”, explica Babul.
Pero no todos los casos son iguales, precisa la psiquiatra. “Hay personas que tienen más factores de riesgo que otras, como los biológicos (carga genética) y el carácter (mecanismo de defensas que cada uno tiene para manejar el éxito o el fracaso)”, dice. En cambio, se pueden potenciar los factores protectores para no caer en los de riesgos, “como un estilo de vida saludable, respetar los horarios con la familia, no creer que toda la vida es trabajo, administrar de mejor manera la agenda, y aprender a trabajar en equipo, para alivianar la carga de trabajo”, aconseja.
Los autores del estudio -publicado a inicios de febrero- dan más detalles de cómo reconocer cuando un colega presente problemas de abuso de alcohol, cómo las escuelas de Derecho han estado enfrentando este tema y qué rol de apoyo deberían jugar los colegios de abogados en un artículo subido al sitio www.americanbar.org.