La nueva firma se dedicará únicamente a asuntos penales, con especial énfasis en litigios penales económicos, fraudes, delitos ambientales y...
Inglés avanzado, ¿engañan los abogados en sus currículum?
Idealis tomó una muestra aleatoria de 4.000 CV, y dentro de esa muestra, consideró un subgrupo que superó los 1.000 abogados que afirmaron tener un inglés “avanzado”, para luego confrontar la afirmación con una medición del inglés hablado durante la entrevista: 1 de cada 4 abogados exagera su nivel.
25 septiembre, 2016
-Sofía Martin, Felipe Lavín
Hoy, hablar inglés es un requisito tan importante como saber derecho civil. Puede que esta aseveración de un reclutador de abogados no le caiga bien a todos y haya connotados académicos que estén en total desacuerdo. Pero el mercado legal dice otra cosa.
Son tantos los abogados titulados cada año, que frente a una eventual contratación los estudios y las empresas van descartando a los numerosos candidatos por distintos conceptos. Y cuando se trata del inglés, piden algo más que el nivel intermedio: normalmente exigen un manejo avanzado. La idea es que el abogado pueda participar en una reunión presencial, pero también en una vía conferencia telefónica; y que además de revisar documentación en ese idioma, pueda escribir correos electrónicos con una gramática decente y sea capaz de redactar reportes o informes de manera profesional.
A lo largo de los años, en Idealis se ha comprobado que los abogados se sobrevenden con su nivel de inglés: existe una brecha entre lo que declara el curriculum vitae (CV) y la realidad. ¿Cuántos de ellos realmente saben un inglés funcional?
Intermedio, avanzado, bilingüe
Al analizar esta habilidad o conocimiento, es un buen indicador mirar qué expresión utilizan los candidatos para referirse a su nivel de inglés.
La premisa es: si no puedes sostener un diálogo coloquial con alusiones jurídicas, no parece lógico —ni acertado ni verídico— que declares “dominio” del inglés, que eres “bilingüe”, o que tu nivel es “avanzado”. Esta última expresión es especialmente interesante porque se subentiende que no hay un nivel avanzado plus, o súper avanzando, por lo tanto, se le está comparando con el nivel básico y el intermedio.
La mejor expresión para esquivar el tema y esperar no ser descartado es simplemente afirmar que tiene “inglés”; así tal cual, a secas. Pero eso ¿qué significa?
Mejor no exageremos
Idealis tomó una muestra aleatoria de 4.000 CV, y dentro de esa muestra, consideró un subgrupo que superó los 1.000 abogados que afirmaron tener un inglés “avanzado”, para luego confrontar la afirmación con una medición del inglés hablado durante la entrevista.
El resultado es sorprendente: 1 de cada 4 abogados exagera su nivel de inglés en su CV.
Algunos no se avergüenzan de no poder expresarse en esa lengua en una entrevista de trabajo. Habiendo afirmado dominar el idioma, la clásica disculpa es “mi inglés está un poco oxidado, no lo he ocupado últimamente”.
No hay duda de que para un abogado es una herramienta y una estampilla más en su pasaporte laboral, tal como haberse titulado o tener experiencia laboral. La diferencia es que se piensa que el nivel de inglés es algo subjetivo y entonces hay derecho a equivocarse o a exagerar, sin consecuencias. Si se piensa lo mismo acerca de las otras dos estampillas, ya no es “dolo bueno”: eso ya es fraude.
De los que se atreven a autocalificar su nivel de inglés, los más imprecisos —o derechamente engañoso— son aquellos que dicen tener un inglés avanzado, a diferencia de los que dicen tener fluido o bilingüe.
Aprender otro idioma —para aquellos que no obtuvieron en el colegio— es un trabajo constante, que incluye no sólo escuchar música y ver películas sin subtítulos, sino aprender vocabulario y gramática, y practicar mucho para mejorar fluidez y confianza.
En todos los casos, la recomendación de Idealis es la misma: certificar el nivel. Y para ellos existen varias opciones en el mercado, con precios muy accesibles algunos, que miden los famosos listening, reading, speaking and writing. Hazlo.
* Felipe Lavín es director de Idealis Legal Recruitment y Sofía Martin es directora de Idealis Lex Reports.