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Asociación Chilena de Litigación, preocupada de los problemas de oratoria
Los miembros de la organización estudiantil señalan que uno de los principales motivos por los que se asociaron fueron las carencias de las casas de estudio a la hora de enseñar cómo enfrentar las audiencias.
27 mayo, 2025
-A inicios de mayo se dio fin al Torneo de Debate Jurídico “Dr. Antonio Bascuñán Valdés” realizado por la Asociación Chilena de Litigación en colaboración con el Colegio de Abogados de Chile. El ganador del torneo terminó siendo el equipo de la Universidad Finis Terrae, seguido por la Universidad del Alba en segundo lugar, y el tercer lugar lo consiguió la Universidad de Chile.
La moción presentada y debatida en la final del campeonato fue: “La responsabilidad de prestar servicios legales gratuitos a quienes no pueden acceder por sus propios medios debería recaer únicamente en el Estado”.
La entidad, fundada en 2024, cumple su primer aniversario el 21 de junio. El presidente de la Asociación Chilena de Litigación y estudiante de quinto año de la Universidad de Chile, Andrés Rubilar, comenta que la creación de la organización no solo busca organizar certámenes a nivel nacional sobre la disciplina, sino también desarrollarla como tal.
Pablo Ruiz Tagle, decano de Derecho de la Universidad de Chile, Carlos Peña, rector de la Universidad Diego Portales y María Cristina Gajardo, ministra de la Corte Suprema, integran el Consejo Asesor de la institución.

El origen se remonta a un grupo de litigación de la Universidad de Chile, que procuraba subsanar las falencias en la instrucción de los alumnos. La propuesta tuvo gran acogida, impulsando la formación de entidades semejantes en otras casas de estudio. En consecuencia, los organismos se unieron y concretaron la creación de una asociación nacional con el propósito de orientar la actividad en el país, la realización de torneos entre diversas facultades de Derecho y el apoyo para que universidades que no son parte puedan fundar organismos propios.
“Empezamos con cuatro sociedades de litigación y actualmente somos 14. Al principio todas las organizaciones eran de la Región Metropolitana y actualmente tenemos presencia en Los Ángeles, Puerto Mont, Valparaíso, Concepción, Antofagasta, entre otras zonas. Eso nos tiene muy contentos, porque habla también de que la asociación misma ha crecido y se ha desarrollado muy bien”, explica Rubilar.
El presidente señala que los alumnos que participan en estos campeonatos valoran estas oportunidades porque se ven obligados a preparar un caso con hechos de relevancia jurídica y deben aplicar lo aprendido en clases, que se olvida por la falta de práctica: “Han logrado hacer conexiones en la organización y han aprendido sobre la forma en que los jueces deliberan dentro de un litigio. Eso último es importante porque en la carrera nos enseñan las normas y sus interpretaciones, pero no se explica cómo al final los ministros de la corte terminan razonando para aplicar las leyes en un caso concreto”.

Generalmente, este tipo de organizaciones son apadrinadas por departamentos de enseñanzas clínicas porque, en la opinión de Rubilar, justamente son los más conscientes de las deficiencias de la enseñanza universitaria: “La práctica de pulir la habilidad oratoria y la argumentación jurídica no se enseña tanto. Entonces, uno llega al último año de la carrera, empieza a trabajar dentro de una clínica, por ejemplo, y descubre que no sabe realmente qué hacer”.
Javiera Loyola, directora de extensión de la Asociación Chilena de Litigación y estudiante de la Universidad de Chile, relata que ella, junto con otros estudiantes, ha avanzado en la carrera con pocos conocimientos sobre el litigio: “Dentro de las universidades existe efectivamente esta carencia. Hay muchas personas que no tienen un juicio simulado hasta que van en cuarto o quinto año. No conocen la forma de presentarse a los jueces, tampoco cómo funciona la estructura de lo que es un juicio e incluso nunca han visto uno”.
Planes a futuro: seminarios y ampliación de miembros
Andrés Rubilar señala que en la escuela de leyes de la Universidad de Chile se proyecta transformar el grupo de litigación de la entidad en un seminario respaldado por el departamento de enseñanza clínica, mediante el cual los alumnos obtendrán créditos y calificaciones. Una de las ventajas de este esquema, según el presidente de la Asociación, es que, a diferencia de un Moot, ahí se abarcan diversas áreas del Derecho y se realizan simulacros judiciales de manera continua.

“Creo que uno de los desafíos que tenemos es internacionalizarnos. No es tan fácil, porque las normas en cada país son distintas. Por lo tanto, no siempre es posible invitar a una organización extranjera a participar bajo leyes que son a veces muy distintas a las que tienen en sus respectivas jurisdicciones. Dentro del debate jurídico es donde puede haber una mejor interacción internacional. Podemos crear un espacio para reflexionar en torno a las normas de los países, el ‘deber ser’ de los jueces e ideas para afrontar los desafíos que nos traen los tiempos contemporáneos y el futuro”, explica Rubilar.
Otro reto consistirá en la incorporación de otros integrantes del ámbito legal a la entidad que no sean alumnos o docentes. el presidente de la Asociación menciona que la organización no es eminentemente estudiantil, que existen incluso algunas sociedades de litigación que conforman la organización que son lideradas por las propias autoridades universitarias, en parte porque se están institucionalizando las sociedades como ramos optativos o electivos. Además, no se excluye la participación de abogados jóvenes.
“Una de las innovaciones de nuestros campeonatos de debate legal sobre ética es que los equipos pueden estar formados por abogados jóvenes. Por lo tanto, ya existe un acercamiento con el ámbito profesional y no solo estudiantil. Considero que esto irá en aumento por ser una propuesta muy atractiva y, además, hay diversos incentivos para participar. En el ejercicio profesional de los abogados también se observan ciertas carencias en oratoria y argumentación jurídica. Esto lo sabemos por los comentarios de los jueces que participan en nuestros torneos o que a veces nos dan clases. En ese sentido, creo que puede ser una buena instancia para que los abogados también mejoren sus habilidades”, comenta Rubilar.
Claudia López, tesorera de la Asociación Chilena de Litigación y estudiante de Derecho de la Universidad de Las Américas, concuerda con el presidente y destaca la importancia de no cerrarse a ningún grupo en pos de lograr una expansión efectiva: “Ya realizamos este torneo de debate con el Colegio de Abogados y con ello podremos captar a nuevas personas con las que realizar clases y más competiciones”.
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